“Es tonada de espumas en los labios del mar...”
Julia de Burgos
“Al
sentido instantáneo de la eternidad
corresponde
este encuentro investido de hilo negro.”
corresponde
este encuentro investido de hilo negro.”
César Vallejo
ERASE UNA VEZ UN
POEMA
Erase una vez un poema perseguido
por la literatura. Lo encerraron mil años y un día. Para poder ser, ni un bis a
bis, fugó al despertase de la academia de todas las lenguas que nunca lamian; un
vez que, enfermo sin enfermedad, tal droga enamorada de tus pupilas creciendo
bajo las piedras del mar, rompió todos los cristales del mundo al derramarse
por taquicardias, herido de ingravidez vertical por diagnóstico popular.
La misma vez que erase una vez en
el sueño de la caracola de entre tu cuerpo y el mío el primer fuego que no fingía
irse y venirnos hasta las migas ardió. La misma vez del vértigo del suelo al escalofrío del mar donde la muerte encogida
de hombros, mecidos por la marea de la juventud, la imagen donde el agua da
prólogo a cada nuevo movimiento, cortábamos la respiración al viento, al
pasado, al silencio. Vez más allá del deseo, en el zenit de la certeza, frente
a un mundo en miniatura que se borraba del mapa, del nuestro, Pantera sin
jaula, sí con su mito, no sin su leyenda, sin jaula todo, yacer en torno al fulgor sin reputación, sin sobre el pecho absoluto de la primavera,
en la comisura del polen salvaje a nacernos.
Erase una vez tu cabellera de
serpiente sobre las plantas pulidas de nuestras sombras danzando, tender las
palabras y echarse delicados a los cielos templados de nubes casi vegetales, tiernas
sus blandas alas en la tarde, palomas de hierba en el arrepentimiento del frío,
desnudas las gotas, alzarse, doblarse, retenidos
por el aire, infiltrados.
Erase una vez cerezas sobre el
musgo de tu sexo, enredaderas en el esqueleto mío de la luna, tu rostro que es
el de dios hundiéndose en el mío; lo que fue, lo que no pudo haber sido, el
sabor a tierra palpitando en tu pubis, los museos del útero, diciembre, aventurarse
al delito. Escenas al vapor que atraían, que sigan atrayendo lluvia, lluvia que
vuelva, que vulva, que llueva, cantábamos la virgen de la cueva.
griFOLL
3.8.14